Gastón Samá y Ainelen Thevenon charlaron con el periodista, el cual habló de su relación con las personas mediante los medios de comunicación.
«Cuando era productor me daba cuenta de que nadie atendía a la gente que llamaba. Me dediqué a escucharlos y a leer las cartas que llegaban, las cuales terminaban en un cesto», expresó Lapegüe acerca de cómo comenzó su vínculo con las personas y agregó: «Levantaba las cartas, las leía y trataba de responderlas. Siempre aparecía alguna nota o alguien que necesitaba ayuda. Como movilero también, siempre estaba con los problemas de las personas; me sentía cercano».
Sumado a esto, el periodista recordó cuando empezó a conducir durante la noche y manifestó que nadie veía su programa: «Mí hija me dijo «solo un amigo te puede ver hasta esa hora pa’. Ahí se me ocurrió ‘si te quedas hasta las una sos mí amigo’. Me di cuenta que solo tenía que proponer que se queden con nosotros, porque la competencia era muy fuerte», declaró.
En ese sentido, Lapegüe comentó que la madrugada «es muy fuerte» y que hay mucha gente que «se quiere acostar con una sonrisa». «Lo mismo a la mañana; tratamos de despertar a las personas con una sonrisa, con humor y buena onda», expresó y añadió: «No nos damos cuenta, tal vez, de nuestra importancia, porque somos la compañía para la gente que está sola».
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